Cómo prevenir los cólicos en lactantes

• Una de los consejos que puede ayudarte a eliminar los gases de forma eficaz es, después de terminar de amamantar el primer pecho, es colocar al niño en posición vertical sobre el hombro y darle pequeños golpecitos en la espalda, seguidos de masajes, o pequeños golpes seguidos y secos.
• Un buen aseo nasal en el caso de que el niño no esté respirando por la nariz, esto provoca cólicos porque si la nariz está tapada, al comer aumentará la entrada de aire provocándole gases.
• La alimentación de la madre influye en la aparición de cólicos. Se aconseja evitar productos lácteos y nueces por algunas semanas, estimulantes como la cafeína y el chocolate.
• Cambiar la postura del niño para amamantar, es mejor sentar al bebé sobre el muslo de la madre, con una pierna a cada lado quedando frente al pecho para comenzar la succión.
• Dar masajes en el abdomen.
• Cambiarlo de posición frecuentemente.
• Mecerlos suavemente, si se cansan, ponerlo en un balancín.
• Cargarlo en posición vertical ya que ayuda al movimiento de los gases y disminuyen la acidez. Una mochila portabebés puede ayudarte.
• Coloque un chupete para que siga succionando.
• Cantarle canciones de cuna puede ser muy reconfortante para el bebé.
• Llevarlo a dar un paseo en coche, o en la cuna poner un dispositivo que imite su sonido y vibración. Algunos niños mejoran con otras formas de reproducir sonidos, como el sonido de una lavadora de ropa, o de platos.
• Durante la lactancia, a leche materna inicial de un pecho, es distinta a la final; la primera es más aguada mientras que la segunda contiene más calorías y grasa. Si se le permite al bebé terminar con el primer pecho, antes de ofrecerle el segundo, se pueden reducir los cólicos.
• Mantén la calma, los cólicos no son para siempre y la ansiedad lo único que logra es que el bebé ande irritable y finalmente llore. Si después de 3 meses la situación continúa, llama a tu pediatra.